14/2/14

¿San Lamentin?

Si hace unos años uno mencionaba el día de San Valentín, el interlocutor ocasional se sorprendía.

Claro, nada se sabía de la fecha; no había llegado a estas Pampas la importación del Día de los Enamorados.
La celebración de los tortolitos ha llegado para quedarse.

Enhorabuena para los dueños de restaurantes, vendedores de chucherías, propietarios de hoteles alojamiento y sexshops y comerciantes congelados que arrullados por l´amore pueden levantar cabeza aunque sea por un rato.

Hay adoradores de Valentín por doquier, los que colman los spa de a dos, se matan en los telos o cenan a la luz de las velas. Los que ven en el 14 de febrero una ocasión propicia para sacarle el polvo a la rutina de la pareja.

Abundan también los que llegado el 14 de febrero sienten como si les clavaran una daga en el corazón. Es que esta fecha, como la Navidad, puede llegar a desnudar ausencias y vacíos: el marido que no está, el novio que se fue, la amante infiel y así ad infinitum.

Para los que toman el día desde la melancolía o el resentimiento, San Valentín puede transformarse en San Lamentín. Las letanías son diversas: “ya no hay hombres (o su variable “ya no hay mujeres”), “son tod@s iguales”, “no creo en el amor”...

Un sondeo sin más pretensiones que reflejar el sentir de aquellos que denostan el legado del santo romano, deja frases para el asombro:
Mariana: “nunca en 34 años tuve a una persona que me regalara algo en esa fecha (ni siquiera un beso de amor), por lo cual no me gusta”
Amparo: “deberían eliminarlo del calendario. Es como que alguien se comiera una torta de chocolate con dulce de leche y crema cuando uno está haciendo dieta”.
Marcos: “San Valentín es una alternativa romántica para los que tienen amor y rechazo indiscutido para los que no”.
Mónica: “¡Es un invento para torturar a los que estamos solos! Sobre todo a los que amamos y no somos correspondidos o sí pero en una relación imposible. San Valentín y Cupido podrían agarrarse de la mano e irse bien a la m...son dos guachos”.
Juan: “Si la ven a mi ex novia, que se casó con otro, mándenle mis respetos”.


Como River y Boca: los de un lado y los del otro y en el medio, Cupido desconcertado.

Distinto sería el cantar si, como en otras culturas, el 14 de febrero se celebrara el día del amor y de la amistad. Pero, ¿qué haríamos con el 20 de julio?

Este 14 no les hagas el juego a San Lamentín; ponele onda y, si estás solo/a, andá a tomar un helado con un amigo/a.